Carolina Dell’Oro
Un país es el espacio geográfico, la nación la constituye el andamiaje institucional. La patria, en cambio, es lo recibido de los padres y lo que hemos de entregar a los hijos.
Un país puede ser mutilado, la nación puede transformarse….., pero la patria o mantiene su ser fundante o muere; patria dice a patrimonio, a lo recibido y que hay que entregar acrecentado Pero No adulterado. Patria dice a paternidad y filiación.
La Patria alude a algo recibido y dado, que nos exige ser actores en la responsabilidad histórica de asumir las transformaciones necesarias que han de ser nuestro compromiso personal de acrecentar, es decir aumentar el capital personal y social.
Hacer patria es fundar una realidad en la que todos nos sintamos pertenecientes a través de un sentimiento que auné, integre y cree vínculos significativos entre quienes compartimos una bandera.
Las personas sin un sentido mayor de pertenencia se desvinculan, se descomprometen de las causas mayores. Es el terreno propicio para la odiosidad, el resentimiento y la desconfianza.
Deberíamos detenernos a reflexionar sobre el Chile que queremos construir juntos. Ya no desde las últimas estadísticas que hemos dejado que se conviertan en las “verdades ” que rigen nuestro actuar como país, sino desde las convicciones y compromisos profundos de cada uno de los chilenos, y especialmente de aquellos que se postulan para liderar nuestro país en los desafíos del siglo XXI.
Por eso me hace tanto sentido la frase de Chesterton cuando se refiere al compromiso: “el hombre que hace una promesa se cita consigo mismo en algún lugar y tiempo, el peligro que esto conlleva es que no asista a la cita”
¿Asistirán a su cita los candidatos?
Fuente: https://www.df.cl/opinion/columnistas/carolina-dell-oro/pais-nacion-o-patria